ABOGADOS O DELINCUENTES.

Cury apoya sanciones disciplinarias de la S.C.J. contra abogados Dr. Julio Cury Alegó que en una sociedad fundada en el respeto a la Justicia, el abogado juega un papel fundamental, que es el de ejecutar el mandato del justiciable que representa dentro del marco de la ley. Cury aseguró que por esa razón le endosaba su respaldo a la Suprema Corte de Justicia, al tiempo de estimar como útil y necesaria la imposición de sanciones contra todo abogado que haga uso de “medios reprobados por la moral o que desfigure las vías procesales autorizadas por la ley, ya sea por error inexcusable o por imprudencia manifiesta”. SANTO DOMINGO . - El doctor Julio Cury dijo que la sentencia dictada por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia, mediante la cual inhabilitó para el ejercicio de la profesión de abogado por 6 meses a los licenciados Adriano Rosario y Antonio Ozoria, acusados por la Procuraduría General de la República de violar el artículo 8 de la Ley Núm. 111, sobre Exequátur de Profesionales, es una alerta para que los profesionales del Derecho se cuiden de no prestar sus servicios en violación a las normas éticas y legales. Manifestó que era tiempo de que la actual Suprema Corte de Justicia acreditara su potestad sancionadora en perjuicio de abogados que practican embargos ejecutivos sin el auxilio de la fuerza pública o títulos ejecutorios. “Embargar ejecutivamente por condenaciones contenidas en sentencias desprovistas de la autoridad de la cosa irrevocablemente juzgada, se ha tornado en una práctica temeraria y viciosa que menoscaba la justicia, que es el objetivo de nuestras actividades profesionales”, expresó el reconocido jurista. Alegó que en una sociedad fundada en el respeto a la Justicia, el abogado juega un papel fundamental, que es el de ejecutar el mandato del justiciable que representa dentro del marco de la ley. Cury aseguró que por esa razón le endosaba su respaldo a la Suprema Corte de Justicia, al tiempo de estimar como útil y necesaria la imposición de sanciones contra todo abogado que haga uso de “medios reprobados por la moral o que desfigure las vías procesales autorizadas por la ley, ya sea por error inexcusable o por imprudencia manifiesta”.